viernes, 25 de diciembre de 2009

Nadie (Vol II)

Nadie tiene nombre, por más extraño que suene. Resulta que en mi borrachera debí darle mi número y me llegó un mensaje justamente una semana después de despertarme a su lado. Sinceramente, no me apetecía nada verlo...

Con el paso de los días me di cuenta de q no sabía absolutamente nada de él, ni su nombre ni su nacionalidad, ni a que se dedicaba. De pronto empecé a sentirme muy déspota por no concerle la oportunidad de que se presentara como es debido, además que hay de malo en conocer a una persona? Así pues quede con él el martes de esta semana, dos días antes de navidad.

Le dejé elegir el lugar y la hora, pues no es que estubiera yo muy ilusionada por el encuentro. Así fue como el plan era ir al mismo pub al que fuí con B. Genial. Pensé en llevarlo lo más lejos posible de la mesa en la q me senté aquella vez.

Durante el camino me di cuenta q no tenía ni la más minima idea de como era. Intenté recordar su cara pero seguía viendo una y otra vez su tatuaje. Aún así cuando llegué (diez minutos tarde) lo reconocí incluso de espaldas cuando miré por la cristalera del pub. Tenía un abrigo largo negro y miraba hacia la puerta. Cuando me vió quitó la mirada de la puerta y miro a las botellas del pub, me pareció tierno. Me acerqué y empezamos a hablar, no hubo por mi parte nervios, ni mariposas, ni nada de nada. Me lo pasé bien, es muy simpatico.

Por su parte, ni el más mínimo intento de acercamiento. Hablamos sin parar. Yo decidí no beber nada. Nos pasamos la mayor parte del tiempo desarrollando bromas absurdas. De pronto me pregunto por mi trabajo y ahí me dí cuenta q si el recordaba a que me dedicaba yo no podía preguntarle por él, quedaría demasiado evidente q soy una alcoholica. Luego me preguntó si en mi país estaba haciendo tanto frío como aquí, de nuevo, otra pregunta q no puedo hacerle. Por lo que entendí debe ser de Escocia. Y no se a que se dedica pero tiene viajes de trabajo.

De pronto eran las 11 de la noche, sin más me dijo q tenía que irse porque al día siguiente trabajaba temprano, acto seguido empezó a acariciarme la rodilla. Un poco tarde, pensé para mí. Salimos del pub y me dijo q me acompañaba a mi parada de bus.

Al poco de andar note algo en mi espalda y tube que contener una carcajada al darme cuenta de que era su mano intentando decidir si apoyarse sobre mi hombro o no. Le pasé el brazo por la cintura. Fué demasiado adorable esa situacion.

Llegamos a la parada y el bus estaba llegando. Le vi en la cara que no sabía que hacer, estaba ahí delante mío con las manos en los bolsillos mirando con ansiedad el bus. Me acerqué para llamar su atencion y cuando me miró le di un pico, sin sacar mis manos de los bolsillos de mi chaqueta. "I´ll give you a call these week" me dijo antes de darme otro pico. Le sonreí y asentí, así sin más me subi al bus y al sentarme lo vi ahí de pie mirando al suelo.

Realmente parecía demasiado confundido para ser nadie...

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